Durante las últimas décadas, el concepto de Lean ha sido aclamado como un enfoque revolucionario para lograr la excelencia operativa. A pesar de su historial probado de éxito, muchas empresas luchan por adoptar e implementar completamente Lean.
¿Los obstáculos?
- La falta de compromiso por parte de la alta dirección,
- La idea equivocada de que Lean es exclusivamente responsabilidad del equipo de mejora continua en lugar de ser un deber colectivo de todos los líderes dentro de la empresa, y
- La incapacidad para integrar Lean con la estrategia empresarial, lo que resulta en iniciativas aisladas con impacto mínimo.
Dado que la sostenibilidad corporativa toma protagonismo hoy en día, es esencial reflexionar sobre estas lecciones. Esto plantea preguntas sobre el actual impulso en esta dirección: ¿Es el compromiso ejecutivo con la sostenibilidad tan profundo y genuino como se necesita para una verdadera transformación? ¿Reconocen las organizaciones la importancia de incorporar objetivos de ESG en cada equipo en lugar de aislarlos dentro de equipos especializados de sostenibilidad? ¿Y están las empresas desarrollando estrategias que incorporen inherentemente la sostenibilidad en sus modelos de negocio, pasando de una estrategia de sostenibilidad separada a una estrategia empresarial totalmente integrada y sostenible?
Como podemos ver, muchos de los desafíos que se han planteado a lo largo de los años para la implementación exitosa de la excelencia operativa ahora se plantean con la implementación de la sostenibilidad.
Compromiso de la Alta Dirección. La base del éxito de ESG
Cuando se le preguntó sobre los requisitos esenciales para implementar con éxito una cultura Kaizen, Masaaki Imai, conocido como el padre de la Mejora Continua (CI), enfatizó tres elementos críticos:
- el compromiso de la alta dirección,
- el compromiso de la alta dirección y
- el compromiso de la alta dirección.
Esto resalta la necesidad vital del compromiso de liderazgo para fomentar una cultura de mejora continua y excelencia operativa. La importancia de este principio no se limita a Kaizen y Lean, sino que se extiende a las iniciativas Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG).
La analogía entre la implementación de principios Lean e iniciativas de sostenibilidad subraya una base compartida: el papel indispensable de la alta dirección en impulsar el cambio organizacional. El compromiso de liderazgo con ESG debe reflejarse en sus acciones y decisiones. Este compromiso significa no solo establecer objetivos de ESG, sino también liderar activamente con el ejemplo, moldear una cultura organizacional que valore la sostenibilidad e inspirar a cada miembro de la organización a contribuir hacia estos objetivos. Por lo tanto, el papel de la alta dirección es fundamental en la transición de estrategias empresariales tradicionales a aquellas que son inherentemente sostenibles, asegurando que el enfoque de la organización hacia ESG sea integral y esté integrado en sus operaciones.
Sostenibilidad: Una Responsabilidad de Toda la Organización
Otro error común en el camino hacia la excelencia operativa ha sido interpretar erróneamente quién es responsable de implementar iniciativas de mejora. El fracaso de implementaciones de Lean y Kaizen en varias empresas a menudo se puede atribuir a la suposición de que los equipos de mejora continua (CI) son responsables de estas iniciativas. Este enfoque pasa por alto un principio crucial: la mejora continua es responsabilidad de toda la organización.
Lean y Kaizen se tratan de cultivar una mentalidad de mejora continua que impregna todos los niveles de una organización. Cuando las empresas delegan la responsabilidad de la mejora a un equipo específico, limitan inadvertidamente el potencial para un cambio organizacional generalizado y ponen en peligro su éxito. Los equipos de mejora continua son vitales, pero su papel es apoyar y capacitar a los líderes naturales dentro de la organización, los líderes de todos los equipos, que deben impulsar e implementar iniciativas de mejora.
Este mismo principio se aplica a la implementación de iniciativas de ESG. Muchas empresas están formando equipos de sostenibilidad con la expectativa de que estos equipos lideren la implementación de iniciativas de ESG. Sin embargo, la sostenibilidad, al igual que CI, es una responsabilidad que debe estar integrada en el ethos de toda la organización. Los líderes en todos los niveles deben ser los campeones de la sostenibilidad, integrando los principios de ESG en sus procesos de toma de decisiones y estrategias operativas. El equipo de sostenibilidad debe proporcionar orientación, apoyo y capacitación a estos líderes, ayudándolos a incorporar la sostenibilidad en la cultura y operaciones de la organización.
Una Estrategia Empresarial Sostenible sobre una Mera Estrategia de Sostenibilidad
En la búsqueda de la excelencia operativa, numerosas organizaciones han emprendido Lean, a menudo iniciando su camino con talleres aislados para mejorar áreas específicas de sus operaciones. Si bien estos esfuerzos pueden producir mejoras inmediatas, muchas empresas luchan por cultivar una cultura auténtica de excelencia operativa. Este desafío surge de una supervisión fundamental: el intento de fomentar CI sin integrarlo en la estrategia empresarial central. Las implementaciones más exitosas de Lean y la sostenibilidad de sus principios a lo largo de los años han sido observadas por organizaciones que han integrado la mejora continua en su estrategia empresarial. Estas empresas aprovechan las metodologías Kaizen y Lean no solo como herramientas para la mejora operativa, sino como marcos estratégicos que definen, implementan y supervisan su estrategia empresarial. En esencia, Lean sirve a los objetivos estratégicos de la organización, alineando los esfuerzos de mejora con las metas generales de la empresa.
Un cambio de paradigma similar es necesario al abordar la sostenibilidad. En lugar de conceptualizar la sostenibilidad como una estrategia independiente, las empresas deben aspirar a una estrategia empresarial sostenible en la que los objetivos y las iniciativas definidas incorporen inherentemente los principios de ESG. Este enfoque trasciende la visión tradicional de la sostenibilidad como un esfuerzo periférico o complementario, posicionándola como un principio central en la planificación y ejecución.
Integrar la sostenibilidad en la estrategia empresarial significa que cada decisión, desde el desarrollo de productos hasta la gestión de la cadena de suministro, se toma teniendo en cuenta sus impactos de ESG. Este enfoque holístico asegura que la sostenibilidad no sea solo una casilla que marcar o un conjunto de iniciativas aisladas, sino que esté tejida en las operaciones y propuesta de valor de la organización.
Forjar un Futuro Sostenible: Lecciones del Pasado para Acelerar la Transformación ESG
La llamada urgente a integrar los principios de ESG en el núcleo de las operaciones comerciales subraya un momento crucial para los líderes corporativos en todo el mundo. La necesidad de implementar rápidamente iniciativas de ESG está impulsada por una confluencia de factores: desafíos ambientales crecientes, cambios en las expectativas de los consumidores, evolución de los paisajes regulatorios y el reconocimiento cada vez mayor del vínculo intrínseco entre las prácticas sostenibles y el desempeño financiero. Las apuestas son altas y el tiempo para efectuar un cambio significativo se está reduciendo.
Sin embargo, el camino a seguir está iluminado por los éxitos y contratiempos de transformaciones operativas a gran escala anteriores. Estas perspectivas históricas enfatizan la importancia crítica del compromiso de la alta dirección, la propiedad de los líderes de equipo y la integración estratégica. El momento de actuar es ahora, con las lecciones del pasado iluminando el camino hacia un futuro sostenible y próspero.